Relatos bajo la forma mágica de una propiedad ajena, la del lector. Autoría encubierta en mentira y espejo del que no soy... del que lee. Siniestro juego, encanto de una pasión más allá de mí mismo, inscripta en un otro siempre ausente de mí... agonía de un deseo que se hace signos: símbolos de quienes somos o hacia donde vamos... Entre el silencio y la línea que nos divide: palabras, traducciones de nosotros mismos, lenguajes de nuestra propia ausencia.

domingo, 26 de junio de 2011

Abumba

Abumba el odio de carcaraña canta la vaca costera del sur y tu cantas canción de muerte de muerte cantas

Abumba el oído de tu decir en mis oídos que se cierran para escuchar el silencio por cierto tan necesario y por cierto tan necesario.

Abumba el mar con mis restos que vagan serenos y odiosos por las aguas salinas y sin tierra... saliendo al mar mis gusanos partes a su encuentro para comerlo y así terminar este cuento...





sábado, 18 de junio de 2011

Quizás porque te sigo hablando




Canto una canción

Cuento un canto

Cuento un cuento

y dos cuentos también...

y más...

Libertad y silencio...
eso es un despropósito...

porque vuelves...

porque estás presente en esa memoria que no es presente...

y, sin embargo, canta...

y, sin embargo, es canción...

y canto ese misterio de ser tuyo aún cuando hayas elegido que eso no cuente.

miércoles, 15 de junio de 2011

Versionario


¿Ha visto el hombre la luna?

El hombre ha visto la luna.

¿Avisto el hombre, la luna?

Avisto el hombre.

¿Ha visto él?

Hombre.

La luna.

La luna ha visto el hombre.

La luna ha visto él.

La luna ha visto... al hombre.


La Vida Es Sueño





Jornada Iii - Escena Xix de Pedro Calderon de la Barca

SEGISMUNDO

Es verdad, pues: reprimamos
esta fiera condición,
esta furia, esta ambición,
por si alguna vez soñamos.
Y sí haremos, pues estamos
en mundo tan singular,
que el vivir sólo es soñar;
y la experiencia me enseña,
que el hombre que vive, sueña
lo que es, hasta despertar.

Sueña el rey que es rey, y vive
con este engaño mandando,
disponiendo y gobernando;
y este aplauso, que recibe
prestado, en el viento escribe
y en cenizas le convierte
la muerte (¡desdicha fuerte!):
¡que hay quien intente reinar
viendo que ha de despertar
en el sueño de la muerte!

Sueña el rico en su riqueza,
que más cuidados le ofrece;
sueña el pobre que padece
su miseria y su pobreza;
sueña el que a medrar empieza,
sueña el que afana y pretende,
sueña el que agravia y ofende,
y en el mundo, en conclusión,
todos sueñan lo que son,
aunque ninguno lo entiende.

Yo sueño que estoy aquí,
destas prisiones cargado;
y soñé que en otro estado
más lisonjero me vi.
¿Qué es la vida? Un frenesí.
¿Qué es la vida? Una ilusión,
una sombra, una ficción,
y el mayor bien es pequeño;
que toda la vida es sueño,
y los sueños, sueños son.