Tu mirada taciturna encierra los antros que recorriste.
Quemaste todo y ya no quedan palabras.
El rompecabezas perdió dos piezas y ya no hay retorno.
Mentiras. Falsas promesas. Bajezas.
Soporté por amor, con dolor, todos los avatares.
Largas velas negras. El ataúd ya está ubicado.
Dejo unas flores.
El fin es una gran libertad.