Relatos bajo la forma mágica de una propiedad ajena, la del lector. Autoría encubierta en mentira y espejo del que no soy... del que lee. Siniestro juego, encanto de una pasión más allá de mí mismo, inscripta en un otro siempre ausente de mí... agonía de un deseo que se hace signos: símbolos de quienes somos o hacia donde vamos... Entre el silencio y la línea que nos divide: palabras, traducciones de nosotros mismos, lenguajes de nuestra propia ausencia.

lunes, 27 de julio de 2009

Tu cara de barro




Ese es el continente que te trajo a mí.
Tras años de organización genética y experiencias olvidadas,
la geografía de lo incierto te pone nuevamente ante mis pasos.
Tus cabellos negros hacen marco a la poesía de tu rostro guaraní.
Tus labios poseen el encanto de unos rincones rivereños cercanos
donde los peces nadan libres y pacientes.
Ahora llegas humilde... traes leyendas perdidas de la memoria
y , luego, partes, dejando un misterio duradero...
Tus huellas quedan con una sensación indecible de no saberte ni amarte como debería.

Javier Sosa

domingo, 26 de julio de 2009

La rosa enferma



¡Oh, rosa, estás enferma!

El gusano invisible
que vuela nocturno
en el aullar de la tormenta

Ha descubierto tu lecho
de gozo carmesí,
Y su oscuro amor secreto
tu vivir destruye.

The sick rose

O rose, thou art sick!
The invisible worm
That flies in the night
In the howling storm

Has found out thy bed
Of crimson joy,
And his dark secret love
Does thy life destroy.

William Blake

viernes, 24 de julio de 2009

Momento solar




Una mariposa se posa en mí.
Es una llama imperial
que agota segundos de existencia
en vuelo.

Sus alas se doran al sol
y hacen frágil la libertad de ver.

Se parte el silencio
y roban al sol.

Eclipse y rubí.
Atardece.
Los sueños siguen su camino.

Javier Sosa

miércoles, 22 de julio de 2009

En tanto y en cuanto


No dejaba títere sin cabeza.
La cabeza de ella pensaba por él.
En el tercer piso la esperaba nocturna y serena.
Ella siempre decía que no.
Hasta que un día la mató para poseerla en sí.
Pensaba ser ella.
Eso de pensar es un decir.
No hay nada más que decir al respecto.
Al respecto se refirió el juez, quien tuvo buenas referencias.
Buena vida llevó el juez aunque el tipo fue a la quema.
No hay mal que por bien no venga.
Líbrame del agua mansa que del torrente yo me libraré.

Javier Sosa

Pre-texto



Se contaba que se decía que un rumor andaba y rondaba por las gentes.

Se decía de aquellos que vendríamos a cumplir promesas olvidadas...

Como plumas al viento las difamaciones volaban y nadie las recuperaba de su andar perdido...

Y llegamos justo a tiempo... para hacer nuestra promesa...

Llegamos con la firmeza de recordar nuestro legado...

Aunque del texto acorralado nadie supo decir nada.

Tarde o temprano, las malas lenguas se devorarán entre ellas de a poco.

Nosotros seguimos andando con el texto acorralado y las esperanzas despiertas.

Javier Sosa

Reducidor de cuentos






Hacía mucho tiempo de esta historia.

Pero fue contada una y mil veces.

Cada vez perdía palabras o hechos.

Cada vez se decía menos y se leía más.

Hasta que el reducidor de cuentos comenzó a contar otra historia.

Javier Sosa

martes, 21 de julio de 2009

La puerta




te abres y te cierras dejando ver sólo fragmentos
la mirilla es pequeña y alta, inalcanzable
veo sombras que se deslizan por debajo
se interrumpen y se agitan
peleas, palabras, patadas

silencio

silencio

silencio

te cierras sin contemplaciones

Javier Sosa

viernes, 17 de julio de 2009

Sin la hoja en blanco


¿Con qué cartón hará ese niño su recorrido?
Colage de carros y carretas... con o sin caballos.

"¿Con qué palabra recorro el mundo?", dice el niño cartonero.
Luna lunera mal consejera... canción de cuna, canción.

Cántale al niño que camina los desechos y los desiertos y los desmiente.
¿Con qué cartón hará ese niño su recorrido?
Javier Sosa

Minificciones audiovisuales





Sueño




Hay que simular que uno duerme, aunque te despierte la muerte.
Mi jardín nocturno tiene el aroma de un hacia donde no hay dónde.
Me encuentro en la demora donde pasa el tiempo de la ausencia.
Entoces llega el silencio y lo cubre todo con jazmines.
La luna no encenderá mi pena aunque haya destino.
No encuentro la ventana para entrar en mis ojos.
Hay que poner los ojos donde hay que ver, sino te quedas ciego.

Javier Sosa


jueves, 16 de julio de 2009

Jaula de cantos




No hay nada más atroz
que ser espectador
de la realidad propia.

Lo inevitable se presenta
y arrasa todo.
Uno debe crearse fantasías
en la ausencia
para llenar
los cuerpos de la memoria
para llenar
los cuerpos que hacen a la ausencia.

Si digo "agua"
¿Beberé?
Si digo "amor"
¿Volverás?

¿Por qué las palabras encierran
la promesa de la muerte?

¿Por qué tus ojos
ya no miran mi silencio?

¿A dónde voy esta noche
sin el refugio mismo de las palabras?

Remiendos y remates




Ya no importa que me inviten
a escribir mi lugar en el mundo.
O que lea la minificción
de identidades
que crearon la úlima huella
del último recorrido.

Veo pájaros
e hipocampos:
corceles de la luna
y fabularios errantes.

Me convocó la ausencia
desde el principio
de los comienzos.
De cuando no me sabía
y de antes.
De cuando llegaste
para no estar.

Anoche vino la carta
sin remitente
Anoche vino el lugar
donde me escribo.
Misterios de ningunaparte
pero con muchos destinatarios.

La carta dice que
encuentre su camino perdido.
Que busque en las hojas
que no llegaron.

El sobre voló lejos,
sin saber quién quedaba
leyendo el misterio.

Javier Sosa

La enfermedad como camino


Un closet espera al lado de un agujero. El closet comienza a sacudirse y el movimiento lo arroja al vacío. Cuando toma contacto con la nueva superficie, del mismo sale un joven que explora intrigado. De pronto aparece un ser de geometría esférica que le habla. El ser le pregunta: "¿Quién eres?". Y ante el asombro del joven, le da el mapa del camino para saberse. Le dice que no tema y que avance.

El joven sigue la ruta establecida. Ve un niño que juega solo en la casa de su madrina y le fabrica un juguete para su sonrisa. Más adelante, se cruza con otro niño que es maltratado en la escuela y le entrega un espejo para que se encuentre a salvo en la imagen propia. Unos paso más allá, un psicólogo le define sus temores sin duda y sin afecto a otro niño cuyos ojos esconde. En escena entran unos doctorcitos con anteojos que le toman muestras y le muetran muecas. Quieren que el niño hable y les diga lo necesario para explicar lo inexplicable. Los doctorcitos toman nota y examinan con ciencia cierta. Luego, ve unos padres preocupados hablando con otro hombre que decía: "Es mejor que retiren a su hijo del establecimiento para que no sufra". Al cruzarse con ellos, les entrega unos zapatos para que sigan su camino sin los pies desnudos. Al continuar su rumbo, se topa con una escena inesperada. Dos niños se penetran y comparten sus fluidos con gran desenfreno. Placeres puros que no placen a otros que se creen puros. A ellos les entrega el abrigo de los prejuicios y las mentiras. Un sacerdote los destierra de su creencia y los encierra en la mirada ajena. Así se suceden las múltiples relaciones que a otros jóvenes acontecen con riesgos y sin memoria.

Finalmente, el ratón negro le señala un nuevo rumbo, en el preciso lugar donde el mapa le indicaba consultar al ratón del camino. Asi retorna al lugar donde se halla el ser de geometría esférica que le habla. El ser le pregunta: "¿Quien eres?". El joven responde: "Soy un hombre que camina su destino". "¿Cuál es tu destino?" continúa preguntando. "Mi destino es encontrar el camino de mis propias palabras para saber quién eres". "Soy la enfermedad de tu propia memoria" "No avances hacia el olvido" Y así, el ser se fundió en una luz brillante que iluminó sus próximos pasos: huellas llenas de células de un virus engañoso y revelador, de un reflejo de su propia esencia.

sábado, 11 de julio de 2009

B) Alguna ciudad en alguna parte



Aquello parecería un edificio pero en realidad es una creencia y un dios. Más allá hay muchas palabras en varios pisos con ascensor. Pero aquello y más allá se repiten.

Hay una regla que mide las sendas peatonales, los cordones y los límites horizontales. Hay otros asientos en semicírculo con cúpulas y banderas. Allí hay silencio. Muchos dicen que hay ocultamiento en el parloteo.

Afuera, el reloj marca una hora digitada, una hora que miente. Por eso hay ciertos relojes que se atrasan y otros que se adelantan; porque indudablemente la plaza tiene más palomas que palomitas de maíz. Sin embargo, las manos, como si nada, siguen su destino sin sentido. Arrojan palomitas hasta que se acercan.

Me encanta ver la iglesia y las oficinas, el correo y los tribunales. O las diagonales urbanas infinitas de rascacielos soberbios e imponentes. O esa hermosa ley que nos ordena horizontales con su jerarquía de espacios donde poder habitar las conciencias. El tiempo me sigue midiendo, pero el reloj marca mi hora. El reloj del congreso me acompaña, como lo hacen sus palabras y sus silencios. Entonces vuelvo mis ojos a ellas y les doy de comer a las que están más lejos. Hasta que viene una nueva que no se pelea con las otras. Me mira fijo y fugaz de costado. Me deja inmóvil: soñador y apasionado.

Javier Sosa

Trans


Cruzando,
fuera del límite,
más allá,
se encuentra ella
y el proceso de cambio.
Su transacción simbólica,
la del estar o moverse hacia el otro lado.
Debe transferir,
traducir,
transportar
para que los otros entiendan
que nos se trata de otro
sino de lo mismo
de ser humano.
Transloca su ser,
transita su
camino
del cuerpo y de lo sexual.
Se apropia de lo ajeno
en los ojos ajenos
y ante los mismos.
Se apropia de lo propio
en los ojos ajenos
y ante los otros.
Se apropia
de un derecho a ser
que intentan robarle.
Javier Sosa

viernes, 10 de julio de 2009

El árbol da frutos según su género


Gramatical y arbitrario vegetal de los sistemas lingüísticos naturales. Pertenece a la clasificación nominal de algunas lenguas dentro de un número finito. Hay reglas: diferenciar la identidad femenina de la masculina, sus características, su comportamiento, su actitud. La consideración social y el carácter físico. Hay taxonomía. Una unidad sistemática de organismos jerárquicos emparentados entre la familia y la especie. Hay numerosos significados. Puede elaborarse un producto textil de fibra natural o artificial con palabras neutras o formas de clasificar películas por temática o estilo, ya sea musical, policiaco, histórico o documental. Hay que ordenar las obras. Las principales son: las líricas, épicas y dramáticas. Desde una rama de las ciencias sociales, se trepa entre hombres y mujeres. Busca referencias, genera diferencias y oposición a lo biológico. Se aprende pero cambia con el tiempo con grandes variaciones según diversas culturas y dentro de una misma cultura. Tiene menor separación de los otros por la discontinuidad definida. Finalmente, se hace tanto mayor cuanto más reducido lo es. Igual no es diferente: sólo las relaciones significan poder.


miércoles, 8 de julio de 2009

EL SÍ MISMO Y EL MISMO SÍ



Abrí el closet y me dije sí

Por primera vez me dije sí

Un sí que tardó años en llegar

Años de sufrimiento y aislamiento

De encerrarme en mi pieza

Porque yo mismo

El gran amor de mi vida

No me miraba

No me escuchaba

No me entendía

No me tocaba

Y a veces

Cuando juntaba el coraje

Para enfrentarme y

Decirme sí

Terminaba negándome

Cuando más me quería,

Más lo disimulaba

Me daba a entender que

Estaba cansado de mí mismo

Y una vez dejé de buscarme

Y me convencí

De que me había olvidado de mí

Y pasó tanto tiempo

Que me extrañé

Y terminé extrañándome

De ser quien soy

Hasta que fui un extraño

En mi propio cuerpo

Un intruso en mi propia vida

Entonces dije

¿Cuánto hace que no me pregunto?

Y me pregunté

¿Quién soy?

Y me dije

Soy yo

Y volví a preguntarme

¿Soy yo mismo?

Y me dije sí

Entonces entré en lo profundo de mí

Para rescatarme

Y me empecé a conocer más

Me miraba

Me escuchaba

Me entendía

Me tocaba

Ahora me sentía bien junto conmigo

Y así fue como me hice amigo de mí mismo

Y ahora ni la muerte

Podrá separarme

Javier Sosa


viernes, 3 de julio de 2009

La gran madre



¿Qué se necesita para crear a la gran madre?
Una semilla sale de la tierra hecha carne.
En la habitación del pánico, el hijo siente pánico del hijo.
La gran madre es parida.
Es un rito oculto que nadie sabe.
El padre mata la fama de la madre.
El ruido a agua, a sangre, a barro, a cloacas, a gritos.
La gran madre abraza al hijo que mata.
El hijo siente y sienta.
La historia no termina.
Siempre hay semilla.

Pablo Martínez - Javier Sosa

jueves, 2 de julio de 2009

Hombre león



"Pensar duele
y me molesta que lo escribas.
Él hace de la vida una poesía y escribe."
El hombre león.


¿Qué le pasa al hombre león?
Se sienta cabizbajo y de brazos cruzados.
No sabe qué le pasa,
con su mueca de sonrisa ausente.
Dice que está bien y calla.
Dice que no le pasa nada.
A veces se pone a pensar
y parece que le pasa algo.
Se rasca la cabeza como un niño.
Luego, su boca tapa con su mano alzada
y con el mentón apoya
un pensamiento sobre otro.
No me pasa nada.
Está bien.
Qué se yo.

Javier Sosa

Laberinto


No quiero penar en jardines
ni pasear por sus tumbas,
quiero abandonar esta poesía
y sus murallas.

No es fácil entrar al laberinto
de la libertad,
quiero escapar del ritual
de estas palabras.

Los libros no tienen respuestas
para las páginas
para los párrafos
ni para el punto
que da fin
a estas
líneas.

Javier Sosa