Relatos bajo la forma mágica de una propiedad ajena, la del lector. Autoría encubierta en mentira y espejo del que no soy... del que lee. Siniestro juego, encanto de una pasión más allá de mí mismo, inscripta en un otro siempre ausente de mí... agonía de un deseo que se hace signos: símbolos de quienes somos o hacia donde vamos... Entre el silencio y la línea que nos divide: palabras, traducciones de nosotros mismos, lenguajes de nuestra propia ausencia.

jueves, 2 de julio de 2009

Hombre león



"Pensar duele
y me molesta que lo escribas.
Él hace de la vida una poesía y escribe."
El hombre león.


¿Qué le pasa al hombre león?
Se sienta cabizbajo y de brazos cruzados.
No sabe qué le pasa,
con su mueca de sonrisa ausente.
Dice que está bien y calla.
Dice que no le pasa nada.
A veces se pone a pensar
y parece que le pasa algo.
Se rasca la cabeza como un niño.
Luego, su boca tapa con su mano alzada
y con el mentón apoya
un pensamiento sobre otro.
No me pasa nada.
Está bien.
Qué se yo.

Javier Sosa