Ante la noche, el misterioso equilibrio de las estrellas.
La inapelable normalidad del mundo.
Ante la magia, la locura.
Ante la carcel, el hombre.
Digo de antes como de ahora.
Hay un silencio en la verdad de las cosas.
Hay un castigo para ciertos curiosos del amor.
¿Cómo se enfrenan Romeo y Julieta al amor sin la muerte? ¿ Cómo no pueden ellos, los desequilibrados del amor, escaparle a la muerte por la normalidad del mundo?
Y, aún así, las estrellas siguen ahí, equilibrando la magia de los que saben comprender.