Relatos bajo la forma mágica de una propiedad ajena, la del lector. Autoría encubierta en mentira y espejo del que no soy... del que lee. Siniestro juego, encanto de una pasión más allá de mí mismo, inscripta en un otro siempre ausente de mí... agonía de un deseo que se hace signos: símbolos de quienes somos o hacia donde vamos... Entre el silencio y la línea que nos divide: palabras, traducciones de nosotros mismos, lenguajes de nuestra propia ausencia.

domingo, 4 de septiembre de 2016

La muerte del tiempo

he visto en la pantalla los cuerpos desnudos como en un cementerio de tumbas abiertas

todos muestran sus genitales y las pieles con sus pliegues entreabren los estereotipos que nos dividen

mi deseo se ha encendido de una forma aprendida en la cultura y me da asco no poder huir de eso

me encadena la muerte de no encontrarte en ninguna parte ni en tu propio cuerpo

quisiera creer que hoy vienes a mi como el príncipe prometido y sin embargo esa promesa no la tuve nunca

en las cárceles de este misterio de carne han vivido todos los deseos del mundo y la caja de Pandora sigue abierta

somos siempre los mismos deambulando en la noche de las soledades abiertas como tumbas