Relatos bajo la forma mágica de una propiedad ajena, la del lector. Autoría encubierta en mentira y espejo del que no soy... del que lee. Siniestro juego, encanto de una pasión más allá de mí mismo, inscripta en un otro siempre ausente de mí... agonía de un deseo que se hace signos: símbolos de quienes somos o hacia donde vamos... Entre el silencio y la línea que nos divide: palabras, traducciones de nosotros mismos, lenguajes de nuestra propia ausencia.

lunes, 29 de mayo de 2017

Id est

En la espera llega la señal.

No me la vuelan tus delirios ni me ciegan tus celos.

Voy por lo nuevo. Sé dónde ir.

Tu luz brilla pura y radiante... tu oscuridad se desvanece.

No le temo a tus dudas. Vos podés atravesarlas.

Como en un desnudo cuerpo va mi alma renovada por tus ojos.

Voy cantando una nueva melodía...

Voy a vengar con amor todos los dolores que te causó el mundo.

Abrí la puerta. Estoy del otro lado.