sábado, 27 de junio de 2009
tu trabajo es infinito
viernes, 26 de junio de 2009
La ciudad de ningunaparte
Correo
miércoles, 24 de junio de 2009
Rojo
lunes, 22 de junio de 2009
Salud
viernes, 19 de junio de 2009
Alegoría del Armario
lunes, 15 de junio de 2009
Grace Jones - Corporate Cannibal lyrics
Pleased to meet you, pleased to have you on my plate
your meat is sweet to me
your destiny
your fate
you’re my life support, your life is my sport
I’m a man-eating machine X2
you won’t hear me laughing, as i terminate your day
you can’t trace my footsteps, as i walk the other way
i can’t get enough prey, pray for me X2
(i’m a man-eating machine)
corporate cannibal, digital criminal
corporate cannibal, eat you like an animal
employer of the year, grandmaster of fear
my blood flows satanical,
mechanical, masonical and chemical
habitual ritual
i’m a man-eating machine.. X2
i deal in the market, every man, woman and child is a target
a closet full of faceless nameless pay more for less empitness
i’ll make you scrounge, in my executive lounge
you pay less tax, but i’ll gain more back
my rules, you fools
we can play the money game
greedgame, power game, stay insane
lost in the cell, in this hell
slave to the rhythm of the corporate prison
i’m a man-eating machine…
i can’t get enough prey
pray for me
corporate cannibal…
digital criminal…
i’ll consume my consumers, with no sense of humour
i’ll give you a uniform, chloroform
sanatize, homogenize, vaporize… you
i’m the spark, make the world explode
i’m a man-eating machine, i’ll make the world explode
corporate cannibal…
domingo, 14 de junio de 2009
Diálogos textuales: Epístola II
JONÁS Y LA BALLENA
Jonás hostiga a la Ballena, la insulta, la provoca, le dice que se aprovecha de los peces
pequeños pero que es incapaz de devorar a un hombre, la llama arenque, mojarrita y otros
epítetos injuriosos. Al fin la Ballena, harta de verse así
vilipendiada o acaso para hacer callar a ese energúmeno, se
traga a Jonás sin hacerse el
menor daño.
Una vez dentro del vientre de la Ballena, Jonás empieza a correr de aquí para allá. Profiere ladridos, da puñetazos y puntapiés en las paredes del
estómago de la Ballena. Al cabo de unas horas la Ballena, enferma de náuseas, vomita a Jonás sobre la playa.
Jonás cuenta a todo el mundo que permaneció un año en el interior de la Ballena, inventa aventuras heroicas, afirma que
la Ballena le tuvo miedo.
Moraleja: Si eres grande y poderoso como una ballena y algún Jonás te desafía no lo devores, porque lo vomitarás transformado en héroe.
Marco Denevi
LA BALLENA Y JONÁS
Jonás insiste y su insistencia lo instiga. Las insatisfacciones de la inspiración lo insanan. Insinuaba un heroísmo insípido e insidioso. Sin embargo, por instantes se instauraba. Era insoportable la institución de la insignificancia. Su insignia era insólita.
Pero Jonás y la Ballena eran inseparables. Aunque la Ballena lo inscribiera como insecto, su diminuta presencia la volvía insolente. El poder y la grandeza la instruían, la tornaban insaciable. Pero Jonás no era insabible: su fama era la mejor instrucción para la Ballena.
Moraleja: Si eres pequeño y débil como Jonás y la Ballena te traga, no dejes que te expulse. Profiere alaridos, da puñetazos y puntapies a las paredes del estómago de la Ballena. No hay mejor manera de ser grande y poderoso que saber dar el golpe en el lugar indicado.
Javier Sosa
Diálogos textuales: Epístola I
sábado, 13 de junio de 2009
Madera & deseo
jueves, 11 de junio de 2009
El fatal falo de grafito
No podía escribirse. Le habían dicho que su trazo podía borrarse. La incertidumbre lo apesadumbraba. Hacía catarsis sin sintaxis. La gramática lo amargaba. “Calla” su voz decía. Y el silencio escribía entre líneas, entre síntomas y sintagmas. El paradigma irrumpe, socaba. La indecible pena avanza. Los tiempos se acortan donde se acortaban las distancias. Una mañana azul los pájaros volaron al norte, como de costumbre, llenos de ganas por ganarle a la vida. Sin embargo, su madera se embargaba de desgracia. El 11 de junio fueron sus últimos minutos. Se puso de pie, tomó el arma y se armó de coraje. Cuando lo encontraron, sólo pudieron advertir una mancha iridiscente, opaca y metálica que sangraba sus últimas líneas.
| Javier Sosa |
miércoles, 10 de junio de 2009
El ataque de las páginas
Javier Sosa