Relatos bajo la forma mágica de una propiedad ajena, la del lector. Autoría encubierta en mentira y espejo del que no soy... del que lee. Siniestro juego, encanto de una pasión más allá de mí mismo, inscripta en un otro siempre ausente de mí... agonía de un deseo que se hace signos: símbolos de quienes somos o hacia donde vamos... Entre el silencio y la línea que nos divide: palabras, traducciones de nosotros mismos, lenguajes de nuestra propia ausencia.

domingo, 20 de noviembre de 2016

Impenetrable

Leña sin fuego es lo que hago

La ventana de una mañana cerrada

Un golpe bloqueador

Y quedo en mi quedar

La inacción de los recuerdos

Insectos y aguijones

Algún pájaro que canta

Y la muerte a mi lado esperando