Relatos bajo la forma mágica de una propiedad ajena, la del lector. Autoría encubierta en mentira y espejo del que no soy... del que lee. Siniestro juego, encanto de una pasión más allá de mí mismo, inscripta en un otro siempre ausente de mí... agonía de un deseo que se hace signos: símbolos de quienes somos o hacia donde vamos... Entre el silencio y la línea que nos divide: palabras, traducciones de nosotros mismos, lenguajes de nuestra propia ausencia.

miércoles, 30 de noviembre de 2016

Signo

Si todas mis batallas perdidas aparecen como las nubes del tiempo que lo han cubierto todo...¿qué hace que pueda confiar en tus ojos, aún cuando todo se nos presenta doloroso e indefinido?

Si supieras lo que siento. Si supieras cómo superé tu espada hundida en mi corazón tiempo atrás habiendo intentado volver a creer tantas veces en vos.

Si supieras el miedo desesperado que me despertó de noche, la asfixia, el llanto, tantas veces el llanto... si supieras...

Saber tan poco te bastaría para confiar en mí... sabrías entonces que hay camino por delante... y también sabrías que estaremos un largo e interminable rato juntos... como los minutos de la misma eternidad.