Relatos bajo la forma mágica de una propiedad ajena, la del lector. Autoría encubierta en mentira y espejo del que no soy... del que lee. Siniestro juego, encanto de una pasión más allá de mí mismo, inscripta en un otro siempre ausente de mí... agonía de un deseo que se hace signos: símbolos de quienes somos o hacia donde vamos... Entre el silencio y la línea que nos divide: palabras, traducciones de nosotros mismos, lenguajes de nuestra propia ausencia.

martes, 13 de diciembre de 2016

La rosa

¿Hasta cuándo la duda?

Rosa que empalidece...

Sus gusanos hambrientos

Devorando los restos de una belleza pasada.

¡Oh dicha! En tus pies, mis súplicas.

Rosa marchita...

Tu ácido aroma corrompido por el tiempo.

¿Acaso fueron las horas juntos un montón de arena en el viento?

Los sueños de nuestras pieles húmedas y las profundas satisfacciones de mi carne.

¿A dónde vas?

¿Dónde quedo?