Relatos bajo la forma mágica de una propiedad ajena, la del lector. Autoría encubierta en mentira y espejo del que no soy... del que lee. Siniestro juego, encanto de una pasión más allá de mí mismo, inscripta en un otro siempre ausente de mí... agonía de un deseo que se hace signos: símbolos de quienes somos o hacia donde vamos... Entre el silencio y la línea que nos divide: palabras, traducciones de nosotros mismos, lenguajes de nuestra propia ausencia.

viernes, 9 de diciembre de 2016

Ojos de marihuanero

Mi intuición tiempo atrás, 
Y tus ojos por delante, 
En un ascensor
Cualquier tarde de junio
O un 29 del mismo mes
Cuando nos conocimos...

Una visión de luz en tu oscuridad, 
Algo que jamás
Me hubiera permitido con nadie.

No lo hacías a propósito
Simplemente era tu rutina sexual
Mucho más allá de mí
En cada pelea o más allá de ellas
El amor fracasó mucho antes del amor
Igualmente fui en busca de él 

Trasnochabas mientras yo recorría mi gris frustración 
Para enfrentarme a vos, a tu cuerpo,
A tu mirada y a tu mundo.

Nadie puede rescatarte de la mentira,
De una vida llena de artilugios
Donde yo era el gil de los afectos
Porque el sexo te sobraba.

Alas de un deseo truncado.

Te lo preguntaba.
¿Por qué me querés?
Y al mismo tiempo 
Tus ojos de marihuanero
No sabían la respuesta. 

Ha sido en poco tiempo
Un largo recorrido de ausencias intermitentes peleas y dudas,
Por temores, por desconfianza...

La gravedad suspendía nuestras emociones
La confusión las había transformado en títeres.

Me quedo con el recuerdo triste y amargo
Sin tu cuerpo
Sin tus ojos
Sin tu amor que habría sido el amor...
Pero me di cuenta que yo ya no era para vos.
Todo quedó resumido a borrar una foto y un video...
Revisarnos el celular y entrar a mis olvidados perfiles de Manhunt...
Nunca vas a creer la verdad de mi fidelidad... aturdida por tu duda y tus encuentros ocasionales o charlas condescendientes y especuladas en un mundo virtual que me alejó cada vez más de vos...
Se me ocurrió una amistad... algún lugar donde podamos volver a arrancar... una necesidad de creer en alguna manera de redescubrirnos... pero todo fue malinterpretado... aún mi profunda depresión... mis estados online... mis fotos en Whatsapp... la nada misma me fue desdibujando... y vos en cualquiera.

Alcohol, porros, noche, sexo... una soledad inminente lo cubrió todo.